El Baralt de hoy
Nace
El Teatro Baralt, el teatro de los Marabinos, ícono de la cultura zuliana, que hoy celebra 127 años de historia y de trabajo en el desarrollo cultural de la región. Aunque su origen no se debe rastrear en tal o cual edificio construido en épocas anteriores, sino en el deseo del pueblo de satisfacer la aspiración del cultivo del arte escénico.
Creado en honor al primer americano en ocupar un sillón en La Real Academia Española de la lengua, nacido en Maracaibo el 3 de junio de 1810: Rafael María Baralt. Aunque parece que se pensó en llamarlo Teatro Colón, pero algunos órganos de prensa insistieron en bautizarlo con el nombre del ilustre escritor maracaibero.
Y así nació el Teatro Baralt, su construcción fue lenta: en 1840 el gobierno apoyó levantar una estructura. Allí en esa esquina de bolsillo cercana a la catedral, fue su inauguración el día 28 de Octubre de 1852, con el estreno de la obra de un autor francés “Lázaro o el Pastor de Florencia”.
Funcionó durante 12 años y 25 años (según varios testimoniales).
.Luego de seis años la obra del teatro fue inaugurada el 24 de junio de 1883.
Logro
En 1897, este espacio se convierte en cuna del cine nacional, cuando los hermanos Trujillo Durán presenta, por 4 y 5 reales, el cinematógrafo Lumiére y exhiben las primeras cintas grabadas en estas tierras: “Muchachas bañándose en el lago” y “Gran especialista sacando muelas en el Hotel Europa”.
Convirtiéndose así en Monumento Nacional de Venezuela y Patrimonio de la Humanidad.
Nueva Cara: Reconstrucción
El nuevo Teatro Baralt fue inaugurado con toda pompa el 19 de diciembre de 1932.
En 1998, luego de años de abandono, el pequeño gran teatro, de 30 por 43 metros, reabre sus puertas. El arquitecto Paolo D’Onghia fue el encargado de resolver los problemas causados por el deterioro, estudiar las condiciones generales de la estructura, incorporar materiales nuevos como el aire acondicionado y rescatar la obra original.
Este hallazgo provocó que los restauradores decidieran conservarlo a nivel del subsuelo, sostenido en una compleja estructura metálica en la que se creó una pequeña sala de actividades especiales, cita el diccionario general del Zulia. El Baralt representa la restauración más importante de Venezuela. Las pinturas de Antonio Angulo fueron cuidadosamente tratadas para devolverle majestad a las áreas interiores y el edificio anexo recibió también un tratamiento especial como área de servicios, oficinas y baños.
Nuevas tramoyas, equipos de iluminación, butacas, detalles decorativos y una intensa actividad artística devolvieron el brillo del más importante y antiguo teatro del Zulia.
Hoy
Pero le faltaba algo: Directora del grupo teatral María (Marucha) Antúnez; “Todo muy bonito, todo “chévere” pero ¿y los camerinos? Hicieron el teatro más bonito de la ciudad para entonces pero aparentemente, la fachada, la sala del público, es escenario, ¿y los camerinos donde? Me pareció una falta de respeto hacia nosotros los actores teatrales. Yo se lo plantee en ese tiempo al propio arquitecto esa falla. El podrá un arquitecto muy prestigioso pero no sabe de teatro, yo hubiese preferido arquitectos de acá mismo que ya hubiesen trabajado en esto”
Hoy el teatro Baralt ya cuenta con camerinos para los actores. Cuenta la directora también que la acústica luego de la remodelación era mala, ya que los aires acondicionados los habían colocado en el techo del escenario lo que ocasionaba distorsión de los sonidos. Esto ha sido solucionado.
La virtud que tiene este teatro en cuanto a la política que maneja en comparación con los otros es que les compra las funciones a los grupos teatrales para luego ofrecerlas al público gratuitamente, cosa que otros teatros como el Lía Bermúdez hace lo contrario, le ofrece solamente sus instalaciones a los artistas para que se presenten y el teatro cobra la entrada al público. Lo que hace del teatro Baralt un incentivo al desarrollo cultural de las personas. Que puedan asistir sin problema y gratuitamente a disfrutar de una función de teatro, que no solo entretiene sino que también cultiva. Contribuye a la elevación de la calidad de vida de la colectividad, a través de una programación que fomenta el goce y la apreciación estética, la formación, la recreación y la promoción de los valores artísticos regionales, nacionales y universales.
Para Yackelin Villalobos, actriz y productora teatral, el Baralt es un espacio "maravilloso", desde su escenario hasta su ubicación. "Está anclado en el corazón de la ciudad, por eso se parece a ella y está abierto a todos. Los artistas marabinos tenemos el privilegio de contar con un lugar como éste que nos ayuda a proyectar nuestro trabajo".
Este teatro hoy consta en sus programaciones funciones diversas para la educación de los niños orientada a proveer disfrute estético y formación cultural a los habitantes de Maracaibo y distritos foráneos del Estado Zulia. Los nuevos talentos de la actuación cuentan también con el apoyo del teatro. La gente que frecuenta el teatro es diversa, asisten niños, adolescentes y adultos.
Aunque no ha tenido la oportunidad de presentarse en su escenario, Miguel Lucena, músico, se ha llevado las mejores impresiones del Baralt. "Soy integrante de la orquesta Rafael Urdaneta y quienes trabajan en el teatro nos han abierto sus puertas para nuestros ensayos. Siempre están dispuestos a ayudarnos en nuestro trabajo y eso habla muy bien de la labor que allí se realiza".
El teatro Baralt Monumento Nacional de Venezuela y Patrimonio de la Humanidad. Así se quedó para los marabinos, un patrimonio más de la ciudad como decir La Basílica, el puente sobre el lago, Santa Lucia, y las inolvidables casitas marabinas. Pero en ningún momento se involucra, en ningún momento se toma la molestia de entrar a disfrutar y recordar al teatro. ¿Será que solo está allí para verse bonito? Es triste que se haya dejado a un lado la importancia y la cultura de visitar un teatro. El marabino no la tiene, por lo tanto en Maracaibo no puede existir temporada teatral. Y en consecuencia el que sufre es el Baralt por falta de presupuesto para mantenerlo. No es justo que el teatro de hoy solo este mayormente funcionando para graduaciones, teniendo tan excelentes instalaciones como para presentar grandes funciones teatrales exclusivas e inolvidables, que se llenen los palcos que están sin uso desde hace tiempo.
Cenida Chacín, artista plástico “Lo mejor que ofrece es que sus actividades abarcan todas la áreas del arte. Los marabinos podríamos sacar mucho más beneficio del que sacamos".
Personajes
Freddy Velásquez tiene 23 años vendiendo agua de coco frente al Teatro Baralt. Aunque aseguró que nunca ha entrado a la sala, el tiempo que lleva trabajando en el lugar le ha permitido conocer un poco de la labor que se realiza. "Me beneficio de sus espectáculos. Me dan la posibilidad de incrementar mis ventas". Con esta afirmación pareciera que sólo se tratara de sus ganancias, pero Velásquez ha visto mucho más que eso. "Cuando salen de allí y vienen a comprarme algo escucho muy buenos comentarios, la gente sale con un sonrisa en su rostro. Eso me dio mucha curiosidad y a pesar de que no he asistido a ningún evento, siempre traigo a mis hijos para que entren y pasen un buen rato".
La ruta de trabajo de Higinio González incluye pasar frente "al Baralt" para vender sus helados. "No soy de la ciudad, pero desde que trabajo acá me gusta visitar los sitios más representativos de la misma con mi carrito de helados, entre ellos, el Teatro Baralt". Comentó que sólo lo ha visto por fuera, pero esa fachada es suficiente para saber que se trata de un sitio "importante y de arraigo".
¿Qué es el teatro hoy para los marabinos?
Luego de más de cien años de trayectoria ¿qué importancia tiene el sitio para los marabinos? En busca de la respuesta La Verdad hizo un recorrido por los lugares que rodean el centro cultural con el fin de conocer qué significa el teatro para quienes circulan frente a él. Lugar de proyección artística y centro de entretenimiento son algunas de las concepciones que transeúntes, trabajadores y artistas de la localidad tienen sobre el espacio.
Si el teatro es tan importante, y es patrimonio y monumento nacional. ¿Por qué no visitarlo y quererlo? El teatro Baralt deber ser una joya anclada al corazón de los Zulianos. Hoy el Teatro Baralt está concebido para no cerrar jamás, mediante una programación sólida, continuada y constante, dedicada al consecuente público del Zulia, de Venezuela y del mundo.
Teatro Baralt Maracaibo - Venezuela
27/09/2010